Tras haber sido la clara ganadora de los premios American Musica Awards 2011, la joven cantante country está más de moda que nunca. Ficha sus secretos de estilo para el día y para la noche.
Posee una elegancia innata que hace que casi todo le quede bien, pero además Taylor Swift ha sabido marcar su propio estilo muy alejado del de otras jóvenes estrellas de la canción. Confiesa que le encanta la moda retro y los complementos con un toque vintage, algo que se ve en su indumentaria de diario y en los “guiños” y detalles que no duda en incluir en sus vestidos más espectaculares.
En el escenario, en las galas y eventos o en la alfombra roja su estilismo no pasa desapercibido y cambia con acierto según la ocasión. Unas veces sofisticada, otras con aspecto dulce y romántico y otras con llamativos vestidos que marcan su esbelta figura. Cuida su imagen y su estilo define tendencias. Algunos de sus básicos son:
Mini vestidos “brillantes”
Los elige con frecuencia para la noche y le sientan como un guante. Dorado, plateado y colores metalizados, muy favorecedores, son sus favoritos, sin olvidar el clásico negro, pero siempre con algún adorno que hace que deslumbre convirtiéndola en el centro de todas las miradas (¡toma nota para las fiestas que se avecinan!).
Para las grandes ocasiones, no duda en abandonar su estudiada sencillez para sorprender con vestidos de ensueño ultrafemeninos, entallados, con encajes y tules, de cortes asimétricos y originales escotes, con elegantes combinaciones en blanco y negro o con creaciones que recuerdan el estilismo de las actrices de los años 40, con modelos entallados en la cintura, de faldas de vuelo, plisadas y con volúmenes muy favorecedores.
En el escenario
En el escenario Taylor también juega con distintos estilos, entre ellos, el folk, uno de sus favoritos, con vestidos amplios, faldas terminadas en picos imitando pañuelos, foulares y sus indispensables botas camperas, distintivo country que le encanta. Para interpretar sus dulces baladas sabe como pocas vestirse de la manera más adecuada con propuestas de estudiada sencillez en tonos rosas y coral que le quedan perfectos con su imagen más romántica.
En su indumentaria de diario luce un estilo muy personal. Los leggins y los vaqueros ajustados son algunos de sus básicos, especialmente combinados con jerseys largos, blazers o blusas de aire bohemio y chic donde no faltan los discretos volantes o los detalles en punto o croché. Las camisas de cuadros se encuentran también entre sus favoritas. Ese toque “rudo” en contraste con su rostro delicado consigue un estupendo contraste.
Las prendas superpuestas son otra de las opciones por las que apuesta la joven cantante. Minifaldas con chaquetas largas o sobrecamisas suponen un estilismo acertado sobre todo combinadas con algunos de los complementos favoritos de Taylor, como las botas altas, los botines y zapatos de cordones, las bufandas y pañuelos, la medias llamativas o las coquetas boinas que usa de manera habitual, dejando entrever su bonita melena rubia.
Su predilección por la moda retro se muestra especialmente en los complementos. Grandes y llamativos collares, cinturones que definen la silueta, románticas rebecas, bolsos bandolera o carteras de mano para la noche… y contra el frío, juveniles trencas o elegantes abrigos entallados.
Naturalidad y elegancia
Parte importante de su imagen la forman sus peinados y su discreto maquillaje. Poco amiga de excesos, Taylor juega con su melena ondulada dejándola, en algunas ocasiones, suelta, desplegando toda su sensualidad y, en otras, recogiéndola en favorecedores semirecogidos, muy naturales. Fiel seguidora del estilo vintage no duda en sorprender con elegantes peinados hechos a base de ondas al agua que le dan una imagen ultra chic.
Su maquillaje potencia las cualidades de su piel clara. Sombras discretas en los ojos con un toque “smoke” y labios rosa o nude forman su aspecto más habitual, aunque cuando quiere destacar, sus labios rojos llaman la atención.
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